Coge papel, boli y navega mucho por internet. Es una experiencia chulísima empezar a viajar antes de coger el primer avión.
Si estáis acostumbrados a viajar y os encanta organizar y empezar a viajar antes de tiempo, lo mejor es que os preparéis vosotros mismos vuestra luna de miel. Será un viaje de lo más personalizado.
Si no sois ese tipo de personas, lo mejor es que vayáis a una agencia y ellos os ayudarán con todo.
Nosotros os recomendamos que para elegir y saber cómo organizar la luna de miel deberíais preguntaros y hablar sobre lo siguiente:
¡Allá vamos!
¿Qué presupuesto tenéis?
Es lo primero que tenéis qué establecer. Ver con qué presupuesto contáis y cuánto estáis dispuestos a gastaros. Esto marcará el lugar y el tipo de viaje que podéis hacer. Una vez fijado, podéis continuar con el siguiente escalón.
¿Qué tipo de viaje os gustaría?
Tenéis que pensar si lo que queréis es un plan más de ciudad, cosmopolita, si preferís el máximo relax en una isla desierta, la montaña o si queréis una mochila y toda una aventura. Por supuesto que podéis hacer un mix de estas y hacer varios tipos de viajes en uno.
¿En qué época vais a viajar?
Esto es súper importante porque en función de la época y el lugar al que quieras ir podrás elegir unos destinos u otros. Hay en lugares dle mundo en los que mientras nosotros disfrutamos del verano ellos disfrutan de grandes momentos de lluvias, como los monzones o incluso de hacer muñecos de nieve. También es cierto que si queréis sí o sí uno de esos lugares pero no cuadra con el momento justo después de la boda, podéis posponer la luna de miel. Si os da igual que llueva o haga frío, ¡adelante con todo!
Prepara el viaje con antelación
A la luna de miel se le pone un cierto cariño extra en comparación con los otros viajes. Por ello, si queréis ciertos tipos de alojamientos, vuelos, excursiones… Lo mejor es que lo cojáis con antelación para evitar que no queden alojamientos, por ejemplo, que para vosotros son fundamentales y además el coste será menor.
No te olvides del seguro de viaje
En viajes de muchos días, con muchos alojamientos, lejos de tu país, aviones, etc. Es fundamental que cojáis un seguro de viajes y estéis cubiertos en cualquier momento. Esto os dará mucha tranquilidad.